Muchos inician su emprendimiento, llenos de sueños e ilusiones, con más o menos expectativas, pero todos con la esperanza de una vida mejor.
Y ¿qué es una vida mejor? Algunos dirán que es vivir con un buen nivel de ingresos, para otros será sentir la satisfacción de hacer lo que quieren, de cumplir un propósito o de ser libres… en fin. Tendremos tantas respuestas como personas contesten a esa pregunta.
El punto es que nada de eso ocurre, si no gestionas bien tu negocio. Gestión que debiera comenzar, idealmente, desde que concebiste la idea de emprender, si no desde que te diste cuenta que no tienes idea dónde está la plata de tu negocio. Cuando esto ocurre, significa que vives en el valle de la muerte, que de hecho es una etapa por la que atraviesan todos los emprendimientos. Algunas estadísticas muestran que, en Chile, este periodo dura en promedio unos 24 meses (2 años) obviamente que puede variar, ya que nada es determinante. Su duración dependerá principalmente de la capacidad de gestión del emprendedor, es decir, puede durar menos de 24 meses, digamos entre 6 y 9 meses, y también puede durar más de 24 meses, incluso hay emprendedores que pasan su vida entera en el valle de la muerte. Esto último convierte el sueño en una pesadilla, no solo para el emprendedor, sino para toda la familia.
¿Cómo se gestiona bien un emprendimiento desde el inicio? En mi opinión y experiencia, antes de lanzarse a la piscina y emprender, deben ocurrir 3 cosas que ayudarán significativamente a minimizar los riesgos:
- Evaluar que la idea sea una oportunidad de negocio.
- Evaluar al emprendedor.
- Diseñar el modelo de negocio.
Comencemos por la número 1. ¿Qué ocurre por lo general? Que muchos piensan que evaluar la idea de negocio es analizar sólo si será rentable, o sea, si va a generar utilidad y cuánto; es probable que haya algunos que además considerarán el equipamiento, las herramientas, etc. que requerirán; y los más aventajados incluirán evaluar el mercado (competencia, clientes). Pero lo cierto es que evaluar la idea de negocio es mucho más que eso. Generalmente, cuando trabajo con un emprendedor en su etapa inicial y analizamos la factibilidad de emprender, se sorprenden de la cantidad de cosas que deben ser consideradas y cómo el hacerlo les ayuda a cimentar su negocio, ya que pueden prepararse para el escenario que podrían enfrentar y los obstáculos que deberán superar, lo que les resulta muy valioso.
Para muchos, pensar en emprender se reduce exclusivamente a este punto (evaluar si la idea es rentable). Y es natural, no existe una carrera técnica o profesional, de la cual puedas graduarte como emprendedor, por lo tanto, no hay una malla curricular que garantice que sigues el proceso de formación paso a paso. No. Simplemente te lanzas y que sea lo que Dios, Alá, el Universo o Buda quiera.
En el siguiente post, continuaremos con los otros 2 aspectos.